En octubre, el peso mexicano experimentó una depreciación del 1.78%, equivalente a 35 centavos, terminando el mes en aproximadamente 20.04 pesos por dólar. A lo largo del mes, el tipo de cambio osciló entre un mínimo de 19.11 pesos el 4 de octubre y un máximo de 20.22 pesos el 30 de octubre, nivel que no se observaba desde septiembre de 2022. Con esta caída, el peso acumula una depreciación anual del 18.09%, colocándose como la tercera moneda más depreciada entre las principales divisas globales, solo superada por el peso argentino y el real brasileño, según datos de Banco Base.
Diversos factores externos contribuyen a la presión sobre el peso, entre ellos las próximas elecciones en Estados Unidos y la posible disminución en la tasa de interés de la Reserva Federal (Fed). A nivel nacional, las reformas constitucionales también han generado incertidumbre en los mercados.
Sin embargo, en la última jornada de octubre, el peso mostró una ligera recuperación, apreciándose 11 centavos y cerrando en 20.04 pesos por dólar. La leve alza se atribuye a los recientes datos del crecimiento del PIB de México, que reflejó un incremento del 1.5% en el trimestre, ofreciendo cierto respaldo a la moneda frente a un clima de volatilidad e incertidumbre política.