El pasado 12 de noviembre, elementos de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano detuvieron a Ángel “N”, conocido como “El Tony”, presunto líder de una célula del Cártel de Sinaloa que opera en Tijuana, Baja California. La captura tuvo lugar durante un cateo en un inmueble de la colonia El Pípila, en la delegación Presa Rural. En el operativo se aseguraron dos armas de fuego, tres vehículos, dos cargadores, 75 cartuchos y una propiedad.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que, junto a “El Tony”, se detuvo a tres personas más, y todos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) en Tijuana, que determinará su situación jurídica. La detención de este líder criminal representa un paso importante en el combate a la violencia en Tijuana, una ciudad marcada por la disputa entre el Cártel de Sinaloa (CDS) y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), cuyas pugnas han desencadenado siete tiroteos en los últimos tres meses, especialmente en zonas como la calle Sexta y la delegación La Mesa.
El conflicto territorial ha resultado en la intervención de figuras clave de ambos cárteles: Edwin Rubio, alias “El Max”, y Rafael Yocupicio, alias “El Cabezón”, por parte del CDS; y Javier Beltrán, alias “El Pedrito”, e Isaac Chávez, alias “El Puma”, del CJNG. Esta situación ha generado un aumento en la violencia y la operación de narcomenudistas en la ciudad, quienes operan en las inmediaciones de bares y zonas de vida nocturna, agravando la inseguridad y poniendo en riesgo a los ciudadanos.