El Juzgado de Instrucción de guardia de Teruel ha decretado prisión provisional para un joven de 20 años, conductor de una furgoneta, como presunto responsable de los delitos de homicidio por imprudencia grave y contra la seguridad vial. El joven está acusado de causar la muerte de un conductor en un accidente ocurrido el pasado 12 de noviembre en la carretera A-232, a la altura del municipio de La Puebla de Valverde.
El siniestro, registrado a las 17:20 horas en un tramo curvo del kilómetro 9,8 de la vía, ocurrió cuando el acusado perdió el control de su vehículo, invadió el carril contrario e impactó de manera frontal contra un automóvil. La víctima, un guardia civil que se encontraba fuera de servicio, fue excarcelada del vehículo por los Bomberos de la Diputación de Teruel, pero falleció horas después en el Hospital Obispo Polanco.
El detenido dio positivo en alcoholemia con valores de 0,84 y 0,85 mg/l en aire espirado y también en pruebas de consumo de marihuana y cocaína. Además, es reincidente, con antecedentes por delitos similares. Ante el riesgo de fuga y la posibilidad de que cometa nuevos delitos, el juez ordenó su ingreso en prisión preventiva.
Por los delitos imputados, el joven podría enfrentar penas de prisión de uno a cuatro años por homicidio imprudente y de tres a seis meses por conducción bajo los efectos del alcohol y drogas. Además, podría ser inhabilitado para conducir vehículos durante un periodo de hasta seis años.
La Guardia Civil ha recordado la gravedad de estos actos y las consecuencias legales que enfrentan los conductores que ponen en riesgo la seguridad vial. Este caso reabre el debate sobre la necesidad de mayores controles y medidas para prevenir siniestros provocados por la conducción bajo la influencia de sustancias.