Un 25.1% de los hogares en Puebla se sumaron a la pobreza laboral entre 2023 y 2024, según el Semáforo de Movilidad Social del Centro de Estudios Espinosa Yglesias. Esto implica que 428 mil 345 viviendas adicionales perciben ingresos insuficientes para adquirir una canasta alimentaria básica, cuyo costo oscila entre $754.00 y $979.40 pesos. Con este aumento, el 73% de los hogares en el estado —equivalente a un millón 250 mil 768 viviendas— se encuentran en esta situación.
La pobreza laboral impacta directamente en la movilidad social, dejando a las familias en una posición vulnerable con acceso limitado a servicios básicos como educación, salud y vivienda. Según el diagnóstico, un 54.6% de los hogares poblanos permanecen entre los grupos con los salarios más bajos del país, mientras que el 8.5% de las viviendas reportaron que ningún integrante cuenta con empleo remunerado.
A pesar de los incrementos al salario mínimo y programas sociales implementados por el gobierno, la pobreza laboral persiste e incluso ha aumentado en diversas entidades. Puebla se encuentra entre los estados con los salarios más bajos, junto a Zacatecas, Oaxaca, Guerrero y Veracruz.
Chiapas, por su parte, continúa en semáforo rojo, no solo por el número de hogares nuevos en pobreza laboral, sino también por aquellos que han permanecido en esta condición durante el último año.
Estos datos reflejan la urgencia de implementar políticas más efectivas para combatir la desigualdad económica y garantizar oportunidades de desarrollo para las familias afectadas.