Pachuca tiene una nueva cita con la historia. El equipo mexicano, conocido por sus éxitos internacionales como la Copa Sudamericana, la Copa Challenger, el Derbi de las Américas de la FIFA y seis títulos de la Liga de Campeones de la Concacaf, se enfrentará al Real Madrid, uno de los clubes más prestigiosos del mundo, en la final de la Copa Intercontinental.
El encuentro, que tendrá lugar en el icónico Lusail Stadium, representa una oportunidad única para los Tuzos, dirigidos por Guillermo Almada, quienes llegan a este duelo como el “matagigantes” del torneo. Tras vencer al campeón de la Copa Libertadores, Botafogo, y superar al Al-Ahly en penaltis, el campeón de la Concacaf buscará emular el logro del Necaxa, único equipo mexicano en vencer al Real Madrid en un Mundial de Clubes.
El equipo hidalguense destaca por su solidez defensiva, no habiendo encajado goles en esta competición. Su ataque estará liderado por el venezolano Salomón Rondón, autor de 26 goles en 2024, y el neerlandés-marroquí Oussama Idrissi. La tarea será monumental: enfrentar a un Madrid de lujo, con nombres como Bellingham, Vinícius, Modric y Mbappé, bajo la dirección de Carlo Ancelotti.
Pachuca buscará trascender más allá de los números y lograr lo que parecía imposible: alzar el título mundial y reafirmar su estatus como uno de los grandes del fútbol internacional.