Ciudad de México.- Horas después de que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunciara el envío de una iniciativa constitucional para fortalecer la soberanía nacional, el Senado de la República recibió el proyecto de reforma. La propuesta, que modifica los artículos 19 y 40 de la Constitución, busca evitar la injerencia extranjera, en particular de Estados Unidos, y endurecer las sanciones contra el tráfico de armas hacia México.
El impulso de estas reformas se produce tras la decisión del gobierno estadounidense, encabezado por Donald Trump, de incluir a seis cárteles mexicanos en la lista de organizaciones terroristas globales. Esta medida, según declaraciones de Elon Musk, titular del Departamento de Eficiencia Gubernamental de EE.UU., permitiría el uso de drones militares en territorio mexicano.
A esta postura se sumó Canadá, cuyo ministro de Seguridad Pública, David McGuinty, respaldó la clasificación de los grupos criminales como organizaciones terroristas. Ante este escenario, en su conferencia matutina del jueves 20 de febrero, la presidenta Sheinbaum reafirmó la posición de México en defensa de su soberanía.
“Esta no puede ser una oportunidad para que Estados Unidos viole nuestra soberanía. Ellos pueden nombrar a estos grupos como consideren, pero con México hay colaboración y coordinación, nunca subordinación, no injerencismo y menos invasión. Por ello, hoy presentamos una reforma constitucional que enviamos al Congreso de la Unión”, declaró.
Modificaciones a la Constitución
La reforma presentada por el Ejecutivo federal propone cambios al artículo 19 en materia de seguridad nacional y la adición de nuevos párrafos al artículo 40 para reforzar el principio de soberanía.
En el artículo 40, se establecería que “el pueblo de México, bajo ninguna circunstancia, aceptará intervenciones extranjeras que atenten contra la integridad, independencia y soberanía de la nación, incluyendo golpes de Estado, injerencias en procesos electorales o violaciones del territorio por tierra, mar, aire o espacio aéreo”.
Además, se plantearía que “tampoco se consentirá la intervención en investigaciones y procesos judiciales sin la autorización expresa del Estado mexicano, dentro del marco legal vigente”.
Por su parte, el artículo 19 se reformaría para endurecer las sanciones contra el tráfico de armas, imponiendo penas más severas a cualquier persona, nacional o extranjera, involucrada en la fabricación, distribución, traslado o ingreso ilícito de armamento al país. Asimismo, se aplicaría prisión preventiva oficiosa a extranjeros que participen en actividades ilícitas relacionadas con la injerencia extranjera en territorio mexicano.
La iniciativa será discutida en el Congreso de la Unión en los próximos días, en medio de un tenso panorama diplomático con Estados Unidos y Canadá.