Activistas mexicanos y la iglesia católica en Tapachula, en Chiapas, denunciaron que el “Viacrucis del Migrante” ha estado amenazado por el crimen organizado, con intimidaciones para evitar su tránsito hacia Estados Unidos.
El director del Centro de Dignificación Humana (CDH), Luis Rey García Villagrán, informó que los casi 3 mil migrantes que partieron de la frontera mexicana con Guatemala el pasado 25 de marzo están expuestos al crimen organizado y la violencia, ante el poco involucramiento de las autoridades.
“La frontera sur es un laboratorio social, lo único que ha hecho el Estado mexicano son dos cosas: dejar caminar a los migrantes torturándolos de esa manera y, dos, infiltrar a todos para polarizar las cosas”, sostuvo en entrevista.
El “Viacrucis del migrante” en Chiapas es ya una procesión anual que realizan miles de personas en movilidad, en medio de inéditos flujos migratorios hacia Estados Unidos, donde la migración irregular se ha incrementado un 77 por ciento en 2030 hasta superar las 782 mil personas, según la Unidad de política Migratoria de la Secretaría de Gobernación.
El activista abundó que, tan solo el Sistema Electrónico de Trámites Migratorios, al menos 500 mil personas fueron reconocidas como víctimas por el Instituto Nacional de Migración (INM) en el mismo año.
Por su parte, el padre Heyman Medina, sacerdote de Ciudad Hidalgo, quien acompaña al ‘Viacrucis Migrante’ en varios puntos de la carretera costera, acusó que los migrantes han recorrido más de 100 kilómetros sin la ayuda de nadie.
“No vemos la presencia de las autoridades del INM, (los migrantes avanzan) exponiendo sus vidas y recibiendo amenazas de la delincuencia organizada”, advirtió.
El sacerdote católico contó que el colectivo migrante ya enfrentó amenazas directas de un grupo de por lo menos cuatro camionetas, en las que iban a bordo personas enmascaradas, mismas que intimidaron y amenazaron a las personas en movilidad para evitar su tránsito por el país.