Tras la conclusión del operativo implementado por el Ayuntamiento de Puebla para controlar el ambulantaje, las calles del Centro Histórico han sido reabiertas, y los vendedores informales han vuelto a ocupar sus espacios habituales. A poco más de dos meses del inicio de las acciones, el pasado fin de semana se retiraron las vallas metálicas y elementos de seguridad que impedían la instalación de puestos ambulantes.
El operativo, que comenzó el 9 de agosto bajo la dirección del alcalde Adán Domínguez Sánchez, desplegó agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana para desalojar a los comerciantes informales del primer cuadro de la ciudad. Sin embargo, desde el sábado 14 de octubre, las calles, como la 8 Poniente y otras entre la 6 y 12 Oriente-Poniente, fueron nuevamente ocupadas por vendedores que ofrecen productos de temporada, como ropa y calzado.
Cabe destacar que la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) reportó que, durante la vigencia del operativo, las ventas en los restaurantes del Centro Histórico disminuyeron un 40%, afectando especialmente los fines de semana. A pesar de esto, el alcalde saliente negó que las afectaciones fueran tan severas. El operativo concluyó pocos días antes de que Adán Domínguez entregue la administración al alcalde electo, Pepe Chedraui, el 15 de octubre.