Tras ser localizada con vida el pasado 2 de diciembre, Diana “N”, de 24 años, quien había sido reportada como desaparecida desde el 29 de noviembre en Tehuacán, Puebla, está en el centro de una polémica investigación. Según la Fiscalía General del Estado (FGE), la mujer habría fingido su secuestro para exigir a sus familiares la suma de 250 mil pesos por su presunta liberación.
El reporte de desaparición indicaba que Diana fue vista por última vez cerca del centro comercial “El Paseo” y vestía pantalón de mezclilla, blusa azul marino y zapatos negros. Las investigaciones revelaron que la mujer ingresó a una tienda departamental sin volver a salir, mientras su niñera e hijos permanecían en un taxi. Durante su ausencia, se hospedó en al menos dos hoteles y utilizó un nuevo chip telefónico para enviar mensajes, audios e imágenes que simulaban pánico y cautiverio.
En el segundo hotel, Diana se provocó un aborto con pastillas, abandonando posteriormente el feto en la capilla exterior de la Catedral de Tehuacán. Finalmente, el 2 de diciembre, contactó a su esposo, asegurando que había sido liberada y se encontraba en buen estado.
Las autoridades continúan investigando las razones detrás de sus actos y si estos podrían estar vinculados a otros delitos. La Fiscalía confirmó la veracidad de los hechos, dejando abiertas múltiples interrogantes sobre el trasfondo del caso y sus implicaciones legales y sociales.