El municipio de Guachochi, Chihuahua, vivió una jornada atípica este martes 3 de diciembre, cuando la mayoría de los establecimientos comerciales detuvieron sus actividades en protesta contra la creciente violencia que afecta a la región.
Gasolineras, restaurantes, supermercados y tiendas de abarrotes cerraron sus puertas alrededor de las 4:00 de la tarde, uniéndose a un esfuerzo colectivo para visibilizar los problemas de inseguridad y extorsión que enfrentan los comerciantes locales.
Empresarios y comerciantes, quienes prefirieron mantenerse en el anonimato, señalaron que son víctimas de extorsiones por parte de grupos criminales que operan en la zona. Estas organizaciones exigen el pago de cuotas elevadas para permitir la operación de los negocios, bajo amenaza de ataques, agresiones e incluso asesinatos en caso de incumplimiento.
El cierre coincidió con el inicio de la novena de la Virgen de Guadalupe, en cuya honor se realizó una peregrinación que se transformó en una marcha por la paz. Los habitantes caminaron por las calles del municipio exigiendo justicia y soluciones ante la inseguridad.
El sacerdote Enrique Urzúa, párroco de la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe en Guachochi, explicó que la decisión de detener las actividades comerciales surgió de la sociedad civil, mientras que la iglesia participó mediante la caravana por la paz.
La comunidad de Guachochi hizo un llamado urgente a las autoridades para atender la situación de inseguridad, que afecta no solo a los empresarios, sino también a la calidad de vida de todos los habitantes del municipio. Este evento refleja la gravedad de la violencia que se vive en la región y la necesidad de acciones contundentes para garantizar la seguridad y la paz en la zona.
