Dani Alves, el famoso futbolista brasileño, sigue siendo noticia después de su reciente absolución en un caso de agresión sexual en Barcelona. Después de pasar casi dos años en prisión preventiva, Alves ha quedado libre y ahora se enfoca en resolver algunos asuntos pendientes, entre ellos, un conflicto legal con su antiguo club, los Pumas de la UNAM.
El problema surgió cuando el club mexicano decidió rescindir su contrato con Alves en 2023, tras el escándalo de las acusaciones. Según los directivos de los Pumas, la decisión se tomó porque el jugador no estaba cumpliendo con sus responsabilidades debido a su situación legal en España. Sin embargo, esta acción no fue bien recibida por el exjugador, quien ahora planea demandar al club por lo que considera un despido injustificado.
Los abogados de Alves argumentan que la rescisión fue anticipada y no estuvo respaldada por una justificación adecuada. En respuesta, el futbolista prepara una serie de demandas legales contra el equipo mexicano, incluyendo una demanda civil por daño moral, una denuncia penal por difamación y una demanda laboral por despido injustificado. Además, Alves está exigiendo una compensación económica de dos millones de dólares como indemnización.
El periodista Ignacio Suárez, quien ha informado sobre el caso, ha señalado que los Pumas ya han perdido su primera batalla legal en este conflicto. En la primera audiencia ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), el organismo determinó que el club rescindió el contrato de manera unilateral, lo que podría complicar aún más la situación para los Pumas.
Este caso sigue generando atención, ya que podría tener un gran impacto en el futuro del club y en la carrera de Alves, quien ahora se enfrenta a una nueva batalla legal.
