En respuesta al trágico asesinato del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, la Iglesia Católica en Chilpancingo ha convocado a una jornada de ayuno y oración para pedir por la paz, particularmente en el estado de Guerrero. Arcos, quien asumió el cargo de alcalde apenas seis días antes, fue encontrado sin vida el pasado 6 de octubre.
Mons. José de Jesús González Hernández, Obispo de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, expresó sus condolencias a la familia del alcalde y llamó a la comunidad a unirse en oración por la paz en Guerrero. El obispo también pidió la intercesión de Nuestra Señora del Rosario para alcanzar la paz tan ansiada en la región, afectada por la violencia.
Alejandro Arcos, miembro del Partido de la Revolución Democrática (PRD), había solicitado protección tras el asesinato de su colaborador cercano, Francisco Tapia, días antes. A pesar de contar con seguridad estatal y federal, el cuerpo del alcalde fue encontrado decapitado en una camioneta, hecho que ha conmocionado al estado.
Guerrero, una región marcada por disputas entre cárteles, continúa siendo escenario de violencia relacionada con el narcotráfico, exacerbando la inestabilidad en la región. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, afirmó que se están realizando investigaciones y no descartó que el caso sea atraído a nivel federal.
