En México, miles de mujeres conocidas como Madres Buscadoras, han dejado sus vidas cotidianas para buscar a sus familiares desaparecidos enfrentando abandono estatal, violencia y amenazas.
Convertidas en activistas y forenses autodidactas, estas mujeres excavan la tierra con sus propias manos mientras exigen justicia por los más de 127,000 desaparecidos en el país.
Su lucha, que recuerda a movimientos históricos como las Madres de Plaza de Mayo, ha sido ignorada por sucesivos gobiernos, y muchas han pagado con su vida. A pesar de todo, persisten, porque no buscan solo respuestas: buscan dignidad.