Migrantes que intentaban evitar ser arrestados prendieron fuego a mantas y colchones en un campamento en la ciudad de Chihuahua durante una redada de las fuerzas gubernamentales para despejar el lugar en las primeras horas del sábado.
La actuación del control migratorio de México cerca de la frontera con Estados Unidos se produce justo antes de la investidura el lunes del presidente electo estadounidense Donald Trump, quien ha acusado al gobierno de México de no hacer lo suficiente para frenar la migración a Estados Unidos y amenazó con aumentos de aranceles.
Alrededor de unos 250 funcionarios mexicanos, incluidos oficiales con equipos antidisturbios, rodearon el campamento alrededor de la medianoche, según testigo Reuters.