El regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos plantea un panorama complejo para las relaciones con México, marcando áreas clave como inmigración, comercio, seguridad y medio ambiente. La reciente elección de Claudia Sheinbaum como presidenta mexicana añade una dimensión particular a esta dinámica, dada la tendencia de Trump a menospreciar a mujeres en posiciones de poder. Cualquier gesto condescendiente podría llevar a la presidenta Sheinbaum a adoptar una postura firme en defensa de la dignidad nacional, con percepciones de respeto o falta de este influyendo en las relaciones diplomáticas.
Impacto en políticas migratorias
Trump ha anunciado la restauración del programa “Permanecer en México” y el regreso a políticas de deportación masiva, generando presión en ciudades fronterizas como Tijuana y Ciudad Juárez, que ya han enfrentado crisis humanitarias debido a la acumulación de migrantes. También ha mencionado la posibilidad de aplicar la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para deportaciones de personas sospechosas de actividades delictivas, lo que podría resultar en deportaciones arbitrarias y conflictos legales.
Estrategia contra el narcotráfico
Trump propone designar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas y ha insinuado el uso de la fuerza militar contra ellos, incluyendo ataques selectivos con drones en territorio mexicano. Estas acciones podrían generar una crisis diplomática sin precedentes y aumentar las tensiones, complicando la cooperación en temas de seguridad y provocando un sentimiento antiestadounidense en México.
Cambios en el comercio bilateral
Trump ha sugerido imponer aranceles de entre 10% y 20% sobre todas las exportaciones mexicanas, lo que afectaría a sectores clave como el automotriz, que representa cerca del 4% del PIB de México. Además, la revisión del T-MEC en 2026 podría llevar a renegociaciones con términos desfavorables para México, y Trump ha amenazado con aranceles de hasta 100% si no se intensifican los esfuerzos para controlar el flujo migratorio y combatir el narcotráfico, afectando gravemente las cadenas de suministro.
Colaboración en seguridad fronteriza
Trump planea aumentar el despliegue de tropas y fondos en la frontera, continuando una estrategia de militarización que podría dificultar la colaboración bilateral en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado.
Temas ambientales
El enfoque ambiental de Trump incluye la eliminación de regulaciones sobre emisiones y combustibles fósiles, lo que afectaría negativamente a ciudades fronterizas como Mexicali, donde la calidad del aire ya es un problema. La falta de colaboración ambiental también pondría en riesgo los compromisos de México en el Acuerdo de París.
En conclusión, el retorno de Trump a la presidencia de EE.UU. representa un desafío para México, donde cada negociación será una prueba de la capacidad del gobierno mexicano para proteger la soberanía y los intereses nacionales.