La Municipalidad de Rosario activó un operativo integral para garantizar el orden y la seguridad durante las tradicionales celebraciones del banderazo y el último día de clases, protagonizadas por estudiantes de penúltimo y último año de secundaria. Aunque muchas instituciones aún no concluyen su ciclo lectivo, numerosos jóvenes organizaron sus festejos para este viernes 22 de noviembre.
El operativo inició la noche del jueves y continúa a lo largo del día con la participación de agentes de la Secretaría de Control y Convivencia, quienes se desplegaron en puntos clave de la ciudad para supervisar la prohibición de venta de alcohol a menores y el respeto a las normas de convivencia, como la regulación de ruidos molestos.
Además, equipos de prevención recorrieron zonas emblemáticas como el Monumento a la Bandera, avenidas Pellegrini y Oroño, y sectores del norte de la ciudad, trabajando en conjunto con Gendarmería y Policía. Se incautaron menos de un centenar de bebidas alcohólicas y pirotecnia, y se destacó una disminución en el consumo de alcohol y el uso de pirotecnia, además de una mayor presencia de padres.
El secretario de Control y Convivencia, Diego Herrera, subrayó el compromiso municipal: “Estamos garantizando el cumplimiento de las normas y trabajando con colegios, padres y alumnos para que los festejos sean seguros y responsables”. El operativo continuará durante toda la jornada para acompañar a los jóvenes en esta significativa celebración.