La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reafirmó su postura de no acatar la orden de la jueza Nancy Juárez Salas de Veracruz, quien había exigido la eliminación de la reforma al Poder Judicial del Diario Oficial de la Federación (DOF). Durante un evento político en Campeche, Sheinbaum explicó que dicha reforma, que propone la elección de jueces y magistrados, no puede ser retirada y calificó la orden de la jueza como una “extralimitación”.
La jueza Juárez Salas, amparada en el Artículo 262 de la Ley de Amparo y el 107 Constitucional, había advertido que el desacato a su orden podría acarrear sanciones de hasta 7 años de prisión. No obstante, Sheinbaum argumentó que el Artículo 61 de la misma ley impide que las reformas constitucionales sean detenidas por amparos, y subrayó que la reforma es parte de la voluntad del pueblo mexicano, quien desea elegir a sus jueces.
El conflicto ha generado una reacción en cadena en el Poder Judicial. La Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito decidió mantener un paro parcial de labores, programado para iniciar el lunes 21 de octubre, con el apoyo de la mayoría de los juzgadores. Mientras tanto, la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, respaldó la decisión del gremio, manifestando su preocupación por la situación.
