El Gobierno de Estados Unidos anunció la suspensión de CBP One, la herramienta digital de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) que facilitaba la gestión de citas para solicitudes de asilo en puertos de entrada. Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció este miércoles que esta decisión incrementa los peligros para los migrantes en México.
En un comunicado, MSF alertó sobre el impacto negativo de esta medida, que deja a miles de personas en situación de vulnerabilidad en rutas marcadas por la violencia. Adriana Palomares, coordinadora general de MSF en México, calificó la suspensión como “una decisión irresponsable que tendrá repercusiones inmediatas en la salud y el bienestar de los migrantes”.
Testimonios recabados por MSF reflejan la frustración y desesperanza entre los afectados. Silvia, una venezolana atendida en Coatzacoalcos, expresó: “Nos hemos expuesto a la muerte y estamos a la intemperie con nuestros hijos. Queremos avanzar para ayudar a nuestras familias”.
Además del impacto emocional, el cierre de CBP One intensifica los riesgos de extorsiones, secuestros y violencia en las rutas migratorias. Según datos de MSF, solo en 2024 atendieron a más de 700 sobrevivientes de violencia sexual en México. Ramón Márquez, coordinador de un centro de atención en Ciudad de México, confirmó que ya se han iniciado programas para abordar el aumento de crisis emocionales entre los migrantes.
La cancelación de la herramienta se suma a otras políticas restrictivas, como Quédate en México, que obliga a los solicitantes de asilo a permanecer en condiciones precarias en la frontera norte. En este contexto, MSF también ha documentado un aumento en las caravanas migrantes desde el sur del país, como la de 1,500 personas en Huixtla, Chiapas.
MSF advirtió que esta decisión profundiza la crisis humanitaria y hace un llamado urgente a las autoridades para implementar soluciones que respeten los derechos humanos de los migrantes.
